lunes, 22 de marzo de 2010

Vivir con nuestro destino

Buscando análisis sobre la situación política y económica de nuestro amado país que no refieran a detalles secundarios, banalidades, anécdotas, costumbrismos, y en la medida de lo posible reduzcan el uso de adjetivos a lo básico y necesario, es decir opiniones de gente que se posicione sin recurrir a gustos o pareceres, dimes y diretes, que determine su posición basándose en datos objetivos, en lugar de abusar de las subjetividades o los relatos (no olvidemos que todos conocemos gente que de buena fe dice que se les apareció alguna virgen), encontré esto que incluye la firma de Don Aldo Ferrer, autor de uno de los libros de referencia de mi pensamiento económico: “Vivir con lo nuestro”, que Don Raúl Alfonsín intentó aplicar como modelo, con mi entusiasta apoyo pese a ser yo un jovenzuelo que militaba en la izquierda argentina, y que el peronismo boicoteó salvajemente (siendo uno de los motivos por los que nunca voté al peronismo).

Es irónico que hoy, una parte de aquel peronismo exprese el pensamiento del maestro, y lo más reaccionario del peronismo quiera volver a boicotearlo, para lo cual se esté aliando con el radicalismo que insensatamente se olvidó de sus orígenes ideológicos, y con la derecha tradicional que gusta tanto de mentir sobre los números de la recaudación fiscal y la realidad presupuestaria. Y yo creo que esto se debe a que tienen miedo de que nos demos cuenta que el modelo de Don Aldo Ferrer, que con tanto entusiasmo apoyé durante el gobierno de Raúl Alfonsín, funciona si no le hacen la zancadilla como ya se la hicieron en la segunda mitad de los ’80, y no nos puedan volver mentir acerca de las bondades de un liberalismo que ya sabemos que no funciona, y lo sabemos básicamente porque ya no nos funcionó, porque ya nos llevó a la ruina.

Mucho agradeceré que me envíen análisis objetivos sobre la actualidad política argentina, como contrapunto del posicionamiento del Plan Fénix con el cual me alineo desde siempre, y que, con coherencia debida, no cambiaré a menos que tenga fundamentos para hacerlo.

Adoradores de los adjetivos y las anécdotas abstenerse.


Para un país dueño de su destino
(por Integrantes del Plan Fénix)
Acerca de la designación de la presidenta del Banco Central de la República Argentina se emite la siguiente declaración de integrantes del Proyecto Estratégico Plan Fénix. Las circunstancias por las que atraviesa el proceso para la designación de la licenciada Mercedes Marcó del Pont, en la presidencia del Directorio del Banco Central, en el ámbito del Senado de la Nación, son parte del diferendo político que se despliega actualmente en el Congreso.
Ante esta situación, los abajo firmantes, integrantes del Proyecto Estratégico Plan Fénix, afirmamos que ellas nada tienen que ver con la idoneidad de la licenciada Marcó del Pont, por dos razones.
Primero, por la reconocida solidez de su formación académica y su competencia profesional para el desempeño del cargo.
Segundo, porque su trayectoria es garantía de buen sentido, patriotismo y compromiso con el desarrollo con equidad; ello contrasta con conducciones anteriores que –a través de la “tablita”, la convertibilidad y otras políticas– subordinaron la gestión monetaria a la especulación financiera, endeudaron al país hasta el límite de la insolvencia y desmantelaron el poder administrador del sector público, del que el Banco Central es un instrumento fundamental.
Resuelva lo que resuelva el Senado en el marco de sus atribuciones constitucionales, antecedentes y conductas como los de la licenciada Marcó del Pont son los requeridos para lograr una conducción del Banco Central firmemente involucrada con políticas conformes a un patrón de desarrollo sustentable y equitativo, para un país dueño de su destino.
* Amiune, José M.; Aronskind, Ricardo; Bekerman, Marta; Cimadamore, Alberto; Ferrer, Aldo; Fridman, Natalia; Gaggero, Jorge; Gak, Abraham Leonardo; García, Alfredo T.; Gutman, Graciela; Hecker, Eduardo; Hopenhayn, Benjamín; Keifman, Saúl; Kostzer, Daniel; Kozulj, Roberto; Lischinsky, Bernardo; Müller, Alberto; Rapoport, Mario; Rofman, Alejandro; Ruiz, Julio; Sbattella, José; Vanoli, Alejandro
integrantesplanfenix@gmail.com






No te salves
(Mario Benedetti)


No te quedes inmóvil
al borde del camino
no congeles el júbilo
no quieras con desgana
no te salves ahora
ni nunca
no te salves
no te llenes de calma
no reserves del mundo
sólo un rincón tranquilo
no dejes caer los párpados
pesados como juicios
no te quedes sin labios
no te duermas sin sueño
no te pienses sin sangre
no te juzgues sin tiempo

pero si
pese a todo
no puedes evitarlo
y congelas el júbilo
y quieres con desgana
y te salvas ahora
y te llenas de calma
y reservas del mundo
sólo un rincón tranquilo
y dejas caer los párpados
pesados como juicios
y te secas sin labios
y te duermes sin sueño
y te piensas sin sangre
y te juzgas sin tiempo
y te quedas inmóvil
al borde del camino
y te salvas
entonces
no te quedes conmigo.


1 comentario:

  1. Rafa: es interesante todo lo que se dice aqui en la nota. Los cambios a introducir en el banco central son quizàs el eje de la resistencia al nombramiento, mucho mas que el posible uso de reservas para el pago de obligaciones.
    Es llamativa la resistencia a los cambios. Cambios que a nivel colectivo se objetivan como necesarios: medios, papel prensa, polìtica, industria,o rol de las fuerzas armadas, hasta ayer no constituian parte del temario popular. Como si se pudiera vislumbrar un pais diferente, aunque distante, una direcciòn, mas que una realidad pròxima. Es que realidad y realizar se tocan, tanto en el diccionario, como en el mundo.
    Esto hace que los autollamados "la nueva polìtica" privilegien la crìtica hacia las personas mas que a las ideas. El acento de los noventa en la polìtica real, que ellos parecìan y parecen defender, se choca con el pais real, que no pueden ver (en el sentido de nombrar o incluir en sus proyectos): El cambio que propone la derecha es cambiar todo, o sea, no cambiar nada: Un pais de fantasìa en un mundo solo bélica y financieramente conectado...no sinceramente conectado.
    Espero no haber calificado demasiado. El adjetivo suele matar.

    ResponderEliminar